El Lenguaje divergente en el autismo adulto: una perspectiva neurocognitiva

Por Larissa Guerrero 

El término "lenguaje divergente" no es un concepto reconocido o establecido en lingüística. Sin embargo, es un concepto que se desarrolla desde la realidad de la neurodivergencia.  La diversidad neurobiológica puede manifestarse en diversos estilos de comunicación, dando lugar a un lenguaje que puede parecer divergente en comparación con las normas convencionales, es decir a lo que he llamado o se podría describir como un "lenguaje divergente".

El lenguaje divergente se refiere a un estilo de comunicación atípico que se aparta de las convenciones lineales y estructuras lógicas tradicionales. Esta forma de expresión es especialmente observada en el contexto del autismo y TDAH, se caracteriza por la tendencia a explorar diversas direcciones en la comunicación, desviándose de la ruta convencional de punto A a punto B. Las personas que emplean el lenguaje divergente tienden a introducir asociaciones inesperadas, explorar múltiples aspectos del tema en cuestión y, en ocasiones, divagar hacia otros temas aparentemente no relacionados. Este fenómeno revela la riqueza cognitiva y la singularidad en la forma de procesar y expresar pensamientos destacando la diversidad de la comunicación de las personas neurodivergentes.

El lenguaje divergente en el autismo adulto se define por la propensión a desviarse de las estructuras lineales y lógicas convencionales de la neuronorma aplicadas a la comunicación, como ya se mencionó, en contraposición a seguir una ruta directa de punto A a punto B, las personas autistas optamos por explorar diversos aspectos del tema del que estamos argumentando. Este estilo comunicativo desafía las expectativas convencionales revelando una riqueza de asociaciones inesperadas que podrían pasar desapercibidas para interlocutores neurotípicos.

La hiperconectividad cerebral, característica distintiva del autismo, se erige como un componente fundamental en la comprensión del lenguaje divergente. La capacidad de procesar información de manera rápida, intensa y detallada otorga a las personas autistas una perspectiva diferente, permeada por la exploración de múltiples detalles y asociaciones que enriquecen la expresión verbal. Esta percepción detallada del entorno no sólo contribuye a la introducción de información aparentemente no relacionada en la conversación, sino que también promueve una exploración no lineal que se aparta de las estructuras más tradicionales.

En el núcleo de la exploración no lineal se encuentra la capacidad introducir líneas argumentativas que tienen lógica en nuestra mente lo que resulta en abrir hilos de conversación inesperados por el interlocutor abriendo nuevas oportunidades para descubrir más detalles enriqueciendo la conversación con capas adicionales de significado. Las asociaciones inesperadas revelan una creatividad cognitiva inherente a nuestro neurotipo. Estas conexiones, aunque inicialmente tangenciales, a menudo están arraigadas en una percepción mucho más sensible y en la capacidad de captar relaciones que no son tan evidentes. Este componente añade una dimensión de originalidad a la conversación, desafiando las expectativas convencionales y contribuyendo a la diversidad de pensamiento.

En el contexto del lenguaje divergente de personas autistas, la falta de linealidad en la comunicación puede ser una fuente de dificultad al comunicarnos con personas neurotípicas. El lenguaje divergente a menudo se caracteriza por no seguir las estructuras de conversación convencionales, como introducción, desarrollo y conclusión. Puede saltar entre temas, incluir detalles aparentemente no relacionados y carecer de la estructura lineal típica. Las personas neurotípicas suelen utilizar una organización lineal y secuencial en sus expresiones verbales. La falta de esta estructura puede hacer que sea más difícil para ellos seguir el flujo de la conversación y entender la relación entre las diferentes ideas presentadas.

El lenguaje divergente a veces se centra en detalles específicos o se desvía hacia temas tangenciales. Esto puede hacer que la persona neurotípica se sienta perdida o tenga dificultades para identificar el hilo conductor de la conversación. Las personas autistas podemos emplear metáforas o expresiones que no son comunes en la comunicación neurotípica. Esto puede resultar en malentendidos si la persona neurotípica interpreta estas expresiones de manera literal o no está familiarizada con su significado particular.

El lenguaje divergente a veces incluye cambios abruptos de tema sin una transición clara. Esto puede ser desconcertante para la persona neurotípica, que podría estar acostumbrada a transiciones más suaves en la conversación.

Para mejorar la comunicación entre una persona neurotípica y una persona autista que utiliza un lenguaje divergente, así como para fomentar la inclusión y aceptación debemos comunicarnos de manera participativa.

Estrategias para neurotípicos que promueven el lenguaje divergente:

Escucha activa y paciencia:

• Presta atención con empatía y evita interrupciones.

• Sé paciente y permite que la persona se exprese a su propio ritmo.

Adaptabilidad y flexibilidad:

• Esté dispuesto a adaptarte a diferentes estilos de comunicación.

• Sé flexible en la estructura de la conversación y tolerante con cambios de tema.

Claridad y concreción:

• Usa un lenguaje claro y evita ambigüedades.

• Si es necesario, pide aclaraciones y reformula para asegurarte de entender correctamente.

Comunicación visual:

• Utiliza apoyos visuales, como imágenes o diagramas, para mejorar la comprensión.

• Asegúrate de que las instrucciones sean visuales y verbales cuando sea posible.

Respeto a los espacios y sensibilidades:

• Sé consciente de las sensibilidades sensoriales y adapta el entorno según sea posible.

• Respeta la necesidad de espacio personal y la comodidad sensorial.

Estrategias para Autistas para exigir nuestros derechos:

• Derecho a la aceptación del lenguaje divergente:

• Las personas autistas tenemos el derecho de ser aceptadas y respetadas por nuestro estilo de comunicación, incluso si difiere de la norma.

Acceso a apoyos y adaptaciones:

• Exigir acceso a apoyos visuales, adaptaciones y entornos que faciliten la comunicación efectiva.

Participación en la toma de decisiones:

• Tener el derecho de participar en decisiones que afecten nuestra vida, incluyendo aquellas relacionadas con la comunicación y la inclusión.

Ambientes inclusivos:

• Demandar entornos inclusivos que respeten y valoren la diversidad en los estilos de comunicación.

Educación y concientización:

• Exigir educación y concientización sobre el lenguaje divergente en entornos educativos y laborales para fomentar la comprensión y la aceptación.

Respeto a la autonomía personal:

• Exigir respeto a la autonomía personal y el derecho a ser tratado con dignidad en todas las interacciones.