Diagnóstico contextual
 

El diagnóstico contextual surge como una alternativa al modelo médico patologizante en el ámbito del autismo y otras neurodivergencias. Este enfoque, basado en la comprensión de la experiencia individual, la interacción social y los derechos humanos, busca ir más allá de la mera identificación de síntomas y categorías diagnósticas.

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¿Qué es el diagnóstico contextual?

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El diagnóstico contextual se define como un proceso colaborativo que busca:

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1. Comprensión profunda de la experiencia individual y subjetiva del autismo:

• Exploración de fortalezas, intereses y necesidades: Se realiza un análisis profundo de las capacidades, pasiones y desafíos de la persona en su contexto social y cultural.

• Enfoque en la singularidad: Se reconoce que cada persona autista es única y su experiencia no puede ser encasillada en categorías predefinidas.

• Escucha activa y empatía: Se establece una relación de confianza y respeto con la persona autista, brindándole un espacio para expresar sus vivencias y sentimientos.

 

2. Identificación de recursos y apoyos necesarios:

• Evaluación del entorno social y cultural: Se analiza el contexto familiar, educativo, laboral y social de la persona para identificar las barreras y oportunidades que presenta.

• Diseño de estrategias individualizadas: Se crean planes de apoyo personalizados que se ajustan a las necesidades y objetivos específicos de la persona.

• Enfoque en la inclusión y la participación: Se busca promover la participación activa de la persona en la sociedad, brindándole las herramientas y el apoyo necesarios para desenvolverse con autonomía.

 

3. Promoción de la autoaceptación y la autoestima:

• Validación de las experiencias: Se reconoce la validez de las emociones, pensamientos y dificultades de la persona autista.

• Reconocimiento de la neurodiversidad como una riqueza: Se ayuda a la persona a comprender y aceptar su neurotipo como parte de su identidad, valorando sus características únicas.

• Desarrollo de habilidades de autogestión: Se brindan herramientas para que la persona pueda gestionar sus emociones, regular su comportamiento y tomar decisiones de forma autónoma.

 

Fundamentos del diagnóstico contextual:

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• Discapacidad psicosocial: Se reconoce que el autismo puede generar dificultades en la interacción social y la comunicación, impactando en la participación social y el bienestar de la persona.

• Interacción social: Se considera que la interacción social es una construcción cultural y que las dificultades en este ámbito pueden ser abordadas desde una perspectiva de aprendizaje y desarrollo.

• Derechos humanos: Se defiende el derecho de las personas autistas a vivir una vida plena e independiente, con acceso a la educación, el trabajo, la salud y la participación social.

 

Enfoque en la interacción social:

• Análisis de las dificultades en la comunicación e interacción: Se exploran las barreras que enfrenta la persona para comprender y expresar sus emociones, intenciones y necesidades, así como la forma de comprender el mundo y procesarlo.

• Desarrollo de habilidades sociales: Se implementan estrategias para mejorar la comunicación verbal y no verbal, la comprensión de las señales sociales y la interacción con otras personas.

• Promoción de la inclusión social: Se busca crear entornos inclusivos donde la persona autista pueda participar de forma activa y significativa.

 

Derechos humanos como marco ético:

• Respeto a la diversidad: Se reconoce la neurodiversidad como una riqueza y se rechaza la discriminación por motivos de autismo.

• Igualdad de oportunidades: Se defiende el derecho de las personas autistas a acceder a los mismos servicios y oportunidades que las demás personas.

• Autonomía y participación: Se promueve la participación activa de las personas autistas en la toma de decisiones que afectan sus vidas.

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¿Cómo se realiza un diagnóstico contextual?

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• Observación participante: Se observa a la persona en su contexto natural.

• Entrevistas en profundidad: Se realizan entrevistas a la persona y a sus familiares.

• Análisis de documentos: Se analizan documentos relevantes, como informes escolares médicos, diarios, etc.

• Diálogo socrático: Se utiliza la mayéutica para ayudar a la persona a reflexionar sobre sus experiencias y valores desde la infancia hasta el presente y la experiencia de discapacidad psicosocial, discriminación, experiencia de diferencia, no encajar, enmascaramiento complejo, género, etc.

• Información complementaria: Los test de autoinforme proporcionan información valiosa sobre las perspectivas y experiencias de la persona autista, complementando los datos obtenidos mediante otras técnicas.

• Diversidad de perspectivas: Permiten acceder a la visión de la persona sobre sus propias fortalezas, dificultades, intereses y necesidades.

• Punto de vista en primera persona: Ofrecen una comprensión más profunda de las emociones, pensamientos y estrategias de afrontamiento de la persona.

• Adecuación al contexto: Se seleccionan test específicos que se ajusten a la edad, el nivel de desarrollo y las características de la persona.

• Validez y confiabilidad: Se utilizan test que han sido validados, actualizados y estandarizados para la población autista.

• Diversidad de instrumentos: Se pueden utilizar diferentes tipos de test, como cuestionarios, escalas y entrevistas estructuradas, para obtener una evaluación completa.

 

Validez del diagnóstico contextual:

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La validez de este enfoque no se basa en la categorización diagnóstica, sino en la utilidad que tiene para la persona. Se busca que el diagnóstico contextual sea un instrumento que ayude a la persona a mejorar su calidad de vida.

 

1. Enfoque centrado en la persona:

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• Comprensión profunda de la experiencia individual: El diagnóstico contextual se centra en la comprensión de las fortalezas, intereses y necesidades de la persona, no solo en la identificación de síntomas.

• Evaluación del contexto social y cultural: Se analiza el entorno familiar, educativo, laboral y social de la persona para comprender las barreras y oportunidades que presenta.

• Planes de apoyo individualizados: Se diseñan estrategias de apoyo personalizadas que se ajustan a las necesidades y objetivos específicos de la persona.

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2. Mayor precisión en la evaluación:

• Triangulación de información: Se combinan diferentes métodos de evaluación (observación, entrevistas, análisis de documentos, test de autoinforme) para obtener una visión completa de la persona.

• Evaluación en el contexto natural: Se observa a la persona en su ambiente natural, lo que permite una evaluación más precisa de sus habilidades y dificultades.

• Enfoque dinámico: Se considera que el autismo es un espectro con diferentes niveles de afectación, y que las habilidades y necesidades de la persona pueden cambiar con el tiempo.

 

3. Impacto positivo en la calidad de vida:

• Promoción de la autoaceptación y la autoestima: El diagnóstico contextual ayuda a la persona a comprender y aceptar su neurodiversidad como parte de su identidad.

• Desarrollo de habilidades de autogestión: Se brindan herramientas para que la persona pueda gestionar sus emociones, regular su comportamiento y tomar decisiones de forma autónoma.

• Mejora en la participación social: Se busca crear entornos inclusivos donde la persona autista pueda participar de forma activa y significativa.

 

4. Aportaciones a la investigación:

• Información valiosa sobre la experiencia autista: El diagnóstico contextual puede contribuir a la comprensión de las diferentes formas en que se manifiesta el autismo.

• Desarrollo de nuevas estrategias de intervención: Los datos obtenidos del diagnóstico contextual pueden ser utilizados para desarrollar estrategias de intervención más efectivas.

• Cuestionamiento del modelo médico patologizante: El enfoque contextual del diagnóstico abre nuevas posibilidades para repensar la conceptualización del autismo.

 

5. Enfoque colaborativo:

• Participación activa de la persona: La persona autista es un agente activo en el proceso de diagnóstico y toma de decisiones.

• Colaboración con la familia y otros profesionales: Se busca crear una red de apoyo que acompañe a la persona en su proceso de desarrollo.

• Respeto a la diversidad de perspectivas: Se reconoce que no existe una única forma de ser autista y se valoran las diferentes experiencias y necesidades.

 

Importancia del diagnóstico contextual:

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• Contraposición al modelo médico patologizante: El diagnóstico contextual evita la estigmatización y medicalización de las personas autistas.

• Enfoque centrado en la persona: Se prioriza la comprensión de las experiencias y necesidades individuales.

• Promoción del bienestar y la autoaceptación: El diagnóstico contextual ayuda a las personas autistas a desarrollar una mayor autoestima y confianza en sí mismas.

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El Diagnóstico Contextual desde la Filosofía Práctica o Consejería Filosófica

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El diagnóstico contextual se realiza desde la filosofía práctica o consejería filosófica por las siguientes razones:

 

1. Enfoque transintegrativo:

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• La filosofía práctica busca comprender al individuo en su contexto social, cultural e histórico.

• El diagnóstico contextual toma en cuenta las experiencias, valores y creencias del individuo, así como las estructuras sociales y culturales que lo rodean.

 

2. Análisis crítico:

• La filosofía práctica enseña a las personas a analizar críticamente las situaciones y los problemas que enfrentan.

• El diagnóstico contextual ayuda a identificar las causas de los problemas y las posibles soluciones.

 

3. Diálogo socrático:

• La filosofía práctica utiliza el diálogo socrático para ayudar a las personas a descubrir sus propias ideas y soluciones.

• El diagnóstico contextual se basa en un diálogo abierto y honesto entre el individuo y el consejero.

 

4. Autoconocimiento:

• La filosofía práctica busca promover el autoconocimiento y la comprensión personal.

• El diagnóstico contextual ayuda a las personas a comprender mejor su situación y a tomar decisiones responsables.

 

5. Empoderamiento:

• La filosofía práctica busca empoderar a las personas para que tomen control de sus vidas.

• El diagnóstico contextual ayuda a las personas a desarrollar las herramientas y habilidades necesarias para afrontar los desafíos que enfrentan.

 

El diagnóstico contextual se realiza desde la filosofía práctica o consejería filosófica porque permite un análisis profundo y holístico de la situación de la persona, promoviendo el autoconocimiento, la responsabilidad personal y el empoderamiento.

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A continuación, se presenta una lista de los beneficios del diagnóstico contextual desde la filosofía práctica o consejería filosófica:

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• Mayor comprensión de la situación personal y existencial.

• Identificación de las causas de los problemas.

• Desarrollo de posibles soluciones.

• Promoción del autoconocimiento y la responsabilidad personal.

• Empoderamiento del individuo para tomar control de su vida.

• Capacidad para tomar decisiones.

• Enfoque de derechos humanos.

• Promueve la autodefensa.

• Sentido de apropiación e identidad.